Georgia Bradley, una joven universitaria británica ha protagonizado junto a Pepper, una perra sin hogar, una de esas historias increíbles que ha logrado cambiar radicalmente la vida de ambas.
Pero ¿qué une de por vida a una joven inglesa con una perra griega? Unas vacaciones de Bradley en Creta y una actuación heroica de la perrita marcan el origen de esta historia.
Lo que comenzó con unas relajantes vacaciones en la isla más grande de Grecia se truncó cuando Georgia Bradley, de 25 años, rechazó la invitación en la playa de dos hombres para tomar algo con ellos.
La joven se encontraba en ese momento sola tomando el sol en la playa y tras la negativa a acompañarles, ellos se pusieron violentos y entonces apareció Pepper, una perra abandonada que se enfrentó a los hombres y consiguió espantarles.
Todo podría haber quedado en una anécdota si no fuera porque tras su regreso a Reino Unido, Bradley no podía quitarse a Pepper de la cabeza y decidió regresar a por su salvadora a las dos semanas del suceso.
La incertidumbre de no encontrarla en la playa le hizo tambalear pero ahí estaba la perrita y el encuentro fue muy emotivo.
Tras varios vuelos que se traducen en miles de kilómetros y euros, los trámites para la adopción y la pertinente cuarentena a la que fue sometida Pepper antes del viaje, ambas regresaban felices a Cornwall, Reino Unido.
La adaptación fue excelente, pero aún quedaba una sorpresa que hace que esta historia se parezca cada vez más a un guión de Disney.
A la semana de aterrizar en su nuevo hogar, Pepper daba a luz a seis cachorrillos, con lo que en definitiva Bradley rescató de la calle no a uno, sino a siete perros. Esperemos que haya hueco para todos en este o en otros hogares amigos.
Vía: Boredpanda
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